Brasilia, 28 ene (EFE).- Las presidentas de Brasil, Dilma Rousseff, y de Argentina, Cristina Fernández, formalizarán el próximo lunes en Buenos Aires la alianza para la construcción de dos reactores nucleares con fines de investigación, anunciaron hoy fuentes oficiales brasileñas.
"La idea es trabajar en el desarrollo pacífico y de acuerdo con la visión de la comunidad internacional", comentó en una rueda de prensa el subsecretario para Sudamérica, Centroamérica y el Caribe del Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil, Antonio Simoes.
El diplomático, según declaraciones difundidas por el servicio estatal de noticias Agencia Brasil, indicó que "el proyecto, como un todo, debe tomar cerca de cinco años para ser concluido. Todo lo que se refiere a la instalación de energía nuclear, tanto en Brasil como en Argentina, está sujeto (a la legislación internacional)".
De acuerdo con la información, Rousseff quiere que su primer viaje al exterior en calidad de presidenta sea "marcado por una agenda amplia y completa de trabajo".
Simoes comentó que todavía no está definido el presupuesto para el proyecto, pero "la idea es que cada país construya su propio reactor a partir de proyectos comunes".
"Argentina tiene una experiencia muy grande en la construcción de reactores. Argentina ya vende reactores de investigación para Perú y Australia, por ejemplo. Es muy importante que nosotros podamos hacer un reactor en conjunto", señaló Simoes.
En una visita hoy a la sureña ciudad de Porto Alegre, capital del fronterizo estado de Río Grande do Sul, Rousseff comentó que "dentro de una visión para el posicionamiento de Brasil en América Latina, Argentina es uno de los elementos fundamentales de nuestra política externa".
"El país le daba las espaldas a Argentina y se volteaba para Europa y Estados Unidos. Hoy, sin darle las espaldas a Europa y Estados Unidos, tenemos que percibir el fortalecimiento de la región y, ahí, Brasil y Argentina necesitan tener ese compromiso, que es el de quien asume el liderazgo en el cuadro regional", añadió Rousseff.
Uno de los acuerdos que deben ser firmados en la reunión presidencial será el de la cooperación brasileña para la construcción y parte de financiación de un millón de viviendas populares en Argentina, bajo la experiencia del programa brasileño "Mi casa, mi vida".
En materia de interconexión eléctrica, apuntó Simoes, Rousseff y Fernández le darán impulso al proyecto de construcción a partir de 2012 de la hidroeléctrica de Garabí, que pretende ser instalada entre la provincia argentina de Corrientes y el estado brasileño de Río Grande do Sul, con capacidad para generar 2.900 megavatios.
De igual manera, se busca la construcción de un puente fronterizo entre Sao Miguel do Oeste, en el estado brasileño de Santa Catarina, y la ciudad argentina de San Pedro.
"Hay al frente un horizonte de profundizaciones y hay nuevos horizontes que están siendo abiertos", comentó Simoes en referencia a la continuidad que Rousseff dará a los proyectos pactados con Argentina en el anterior Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva.
Para Simoes, el encuentro del lunes "es una visita de trabajo. Es una visita compacta porque la idea es que se utilice lo máximo del tiempo".
En materia de comercio exterior, con una corriente bilateral anual de 33.000 millones de dólares, Simoes destacó que ese flujo ha permitido la formalización de los empleos, "lo que sostiene el desarrollo económico en otras áreas".
"Vamos a sumar esfuerzos para conquistar mercados para los dos países", aseveró.
En Buenos Aires, detalló el diplomático, Rousseff se reunirá con Fernández en particular, luego ambas participarán de un encuentro interministerial.
Después, Rousseff se entrevistará con representantes de las "Madres de la Plaza de Mayo", movimiento liderado por madres y abuelas que perdieron hijos y nietos en la dictadura militar de ese país, que gobernó entre 1976 y 1983.
(Fuente: European press en Google noticias y selección de Patric)
"La idea es trabajar en el desarrollo pacífico y de acuerdo con la visión de la comunidad internacional", comentó en una rueda de prensa el subsecretario para Sudamérica, Centroamérica y el Caribe del Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil, Antonio Simoes.
El diplomático, según declaraciones difundidas por el servicio estatal de noticias Agencia Brasil, indicó que "el proyecto, como un todo, debe tomar cerca de cinco años para ser concluido. Todo lo que se refiere a la instalación de energía nuclear, tanto en Brasil como en Argentina, está sujeto (a la legislación internacional)".
De acuerdo con la información, Rousseff quiere que su primer viaje al exterior en calidad de presidenta sea "marcado por una agenda amplia y completa de trabajo".
Simoes comentó que todavía no está definido el presupuesto para el proyecto, pero "la idea es que cada país construya su propio reactor a partir de proyectos comunes".
"Argentina tiene una experiencia muy grande en la construcción de reactores. Argentina ya vende reactores de investigación para Perú y Australia, por ejemplo. Es muy importante que nosotros podamos hacer un reactor en conjunto", señaló Simoes.
En una visita hoy a la sureña ciudad de Porto Alegre, capital del fronterizo estado de Río Grande do Sul, Rousseff comentó que "dentro de una visión para el posicionamiento de Brasil en América Latina, Argentina es uno de los elementos fundamentales de nuestra política externa".
"El país le daba las espaldas a Argentina y se volteaba para Europa y Estados Unidos. Hoy, sin darle las espaldas a Europa y Estados Unidos, tenemos que percibir el fortalecimiento de la región y, ahí, Brasil y Argentina necesitan tener ese compromiso, que es el de quien asume el liderazgo en el cuadro regional", añadió Rousseff.
Uno de los acuerdos que deben ser firmados en la reunión presidencial será el de la cooperación brasileña para la construcción y parte de financiación de un millón de viviendas populares en Argentina, bajo la experiencia del programa brasileño "Mi casa, mi vida".
En materia de interconexión eléctrica, apuntó Simoes, Rousseff y Fernández le darán impulso al proyecto de construcción a partir de 2012 de la hidroeléctrica de Garabí, que pretende ser instalada entre la provincia argentina de Corrientes y el estado brasileño de Río Grande do Sul, con capacidad para generar 2.900 megavatios.
De igual manera, se busca la construcción de un puente fronterizo entre Sao Miguel do Oeste, en el estado brasileño de Santa Catarina, y la ciudad argentina de San Pedro.
"Hay al frente un horizonte de profundizaciones y hay nuevos horizontes que están siendo abiertos", comentó Simoes en referencia a la continuidad que Rousseff dará a los proyectos pactados con Argentina en el anterior Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva.
Para Simoes, el encuentro del lunes "es una visita de trabajo. Es una visita compacta porque la idea es que se utilice lo máximo del tiempo".
En materia de comercio exterior, con una corriente bilateral anual de 33.000 millones de dólares, Simoes destacó que ese flujo ha permitido la formalización de los empleos, "lo que sostiene el desarrollo económico en otras áreas".
"Vamos a sumar esfuerzos para conquistar mercados para los dos países", aseveró.
En Buenos Aires, detalló el diplomático, Rousseff se reunirá con Fernández en particular, luego ambas participarán de un encuentro interministerial.
Después, Rousseff se entrevistará con representantes de las "Madres de la Plaza de Mayo", movimiento liderado por madres y abuelas que perdieron hijos y nietos en la dictadura militar de ese país, que gobernó entre 1976 y 1983.
(Fuente: European press en Google noticias y selección de Patric)
